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Una limpieza corporal correcta requiere de cumplir tres condiciones esenciales: utilizar los productos correctos para la piel como el jabón, pasarlo de manera adecuada y realizar dicho proceso de forma periódica. Claro está que la intensidad del mismo depende también de cuánto sudes y te ensucies según las actividades que desarrollas en el día a día.
¿Cuáles son los diferentes tipos de jabones para el cuerpo?
Desde el clásico jabón líquido hasta el de castilla y Marsella; hoy en día cuentas con decenas de tipos de jabones para adquirir y utilizar a diario según tus preferencias o necesidades particulares. Por ejemplo, el líquido es ideal para lavarte las manos, pero para limpiarte el cuerpo mientras te bañas te convendrá el de glicerina y otros similares.
¿Qué funciones cumplen los jabones para el cuerpo?
Aunque lo primero que muchos piensan es “limpiar”, los jabones para el cuerpo sirven para una higienización íntegra. ¿Qué incluye esta última? La quita total de suciedad y bacterias, proveer un aroma exquisito que se mantendrá durante horas y hasta fortalecer el estado de la piel si esta se encuentra débil, entre otras.